Todo está intacto, inmóvil.
Cada paso, cada respiro marca una diferencia.
Si me sostengo de ese objeto brillante, quizás desaparezca.
Mi alma se hunde, mi consciencia se pierde lentamente.
Registro cada cambio en lo más profundo de lo que queda de mi.
Despierto.El planeta sigue girando.
Gotas de alguna vez dejan sus marcas en la ventana.
Hacia afuera se ven dos mundos chocando.
Dos mundos que solían ser aliados.
Qué queda? ya mi cuerpo se ha inmunizado a las emociones.
Debo seguir los rastros que alguna criatura alguna vez dejó.
Una serie de incógnitas se engendraron en mi mente.
Tan sofisticadas!,difíciles de comprender.
Unos actos claros de esquizofrenía fueron producidos por mi intelecto.
Inquirir esta psicosis vertiginosa pero a la vez fugáz,
me ayudó a aclarar ciertas vacilaciones merodeantes.
Hay una fuerza enérgica que me desvanece.
Una fuerza atípica.
Me absorbe y me toma por detrás.
Ya no puedo controlarla.
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